Descartes quiere construir en la filosofía un sistema tan verdadero y perfecto del cual nadie pueda dudar, un sistema que permita calcular en lugar de discutir o disputar (recordemos las disputas medievales y el método dialéctico del sic et non). El modelo de perfección se le presenta a Descartes en las matemáticas, una ciencia exacta en la que se da el progreso y se eliminan las discusiones; por ejemplo, el teorema enunciado en la antigüedad por Pitágoras, sigue teniendo la misma validez en todas las épocas.
El método matemático es tan seguro que hasta un niño puede llegar a alcanzar un conocimiento pleno de las reglas aprendidas. En la segunda parte del Discurso del Método afirma: “…un niño que sabe aritmética y hace una suma conforme a las reglas, puede estar seguro de haber hallado, acerca de la suma que examinaba, todo cuanto el ingenio humano puede hallar; porque al fin y al cabo el método que enseña a seguir el orden verdadero y a recontar exactamente las circunstancias todas de lo que se busca, contiene todo lo que confiere certeza a las reglas de la aritmética”.
Este método diseñado por Euclides en sus Elementos consiste en el uso de la intuición y de la deducción. Mediante la intuición conocemos las primeras verdades evidentes e inmediatas, a las que llamó axiomas. Por la deducción alcanzamos otras verdades a las que llegamos a través de los axiomas y de una cadena de razones. Aplicando estos dos usos, entiende Descartes que el método adecuado para construir una ciencia universal, debe tener sólo cuatro reglas en lugar del gran número que presentaba la Lógica o Metodología tradicional:
# La evidencia como criterio de verdad. “…no admitir como verdadera cosa alguna, como no supiese con evidencia que lo es; es decir, evitar cuidadosamente la precipitación y la prevención, y no comprender en mis juicios más que lo que se presentase tan clara y distintamente a mi espíritu que no hubiese ninguna posibilidad de ponerlo en duda”.
# El análisis. “Dividir cada una de las dificultades que examinase en cuantas partes fuere posible y en cuantas requiriese su mejor solución”.
# La síntesis. “Conducir ordenadamente mis pensamientos, empezando por los objetos más simples y fáciles de conocer, para ir ascendiendo poco a poco, gradualmente hasta conocimientos más complejos”.
# La comprobación de los análisis y síntesis ya efectuados. “Hacer en todo unos recuentos tan integrales y unas revisiones tan generales, que llegase a estar seguro de no omitir nada”.
Utilizando este método en la filosofía, pasa Descartes a buscar una primera verdad evidente, y por tanto indubitable, que sirva a la filosofía como un axioma donde apoyar el resto de afirmaciones o teoremas. Para tal fin inicia la llamada,
martes, 1 de junio de 2010
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